Nos ha dejado Alberto, Alberto Pérez Ruiz, Alberto.
El desasosiego se ha apoderado de sus familiares, de sus amigos, de sus compañeros... y me atrevo a decir que de mucha otra gente que, aunque no le conociese demasiado, seguro que le trató alguna vez por tantos y tantos sitios en los que anduvo. Incluso sus rivales políticos coincidirán en que hemos perdido a una personalidad irrepetible.
En mi cabeza se agolpan los recuerdos. De niño fue para mi, el Alcalde, con todo el respeto que ello suponía pero también con la cercanía que mostraba; me vienen mil actividades lideradas por él durante aquellos años. Luego fue mi profesor, además de matemáticas, que se me daban fatal...; me suspendió en 2º de Bachillerato y tuve que esperar a septiembre para presentarme a la selectividad. Paralelamente se había convertido en mi padre político, pues mi admiración por él y su trabajo, su no parar, su forma de hablar y el entusiasmo con el que expresaba sus ideas, sus principios..., todo ello me llevó a afiliarme a las Juventudes Socialistas de Valencia de Don Juan. Así empezamos una andadura en la que él, ya de retirada política, quiso que los jóvenes conociésemos la historia reciente del socialismo comarcal y provincial. Yo, apasionado del pasado, me embelesaba horas y horas hablando con él de plenos, mítines y otras mil batallas.
Y empezó a escribir sus libros, de los cuales hablábamos mucho, corregíamos... Y durante su etapa en AERLE, compartimos ilusiones, pero también sufrimientos (al conocer historias terribles) y desencantos. También, por qué no decirlo, a veces mantuvimos nuestras discusiones políticas en una triste etapa del socialismo coyantino que unos no supimos manejar y a todos nos dejó sinsabores. Pero hasta del enfrentamiento sacábamos jugo, e incluso nos acercaba más personalmente, pues era de los que al día siguiente volvía a sentarse contigo para dialogar y buscar soluciones.
En los últimos años, ya él en León ciudad, siempre se le encontraba en la biblioteca o en actos culturales. No paraba, siempre de aquí para allá. Ibas con él por la calle y continuamente saludaba a la gente. Frecuentemente venía a Valencia de Don Juan, mantuvo contacto hasta el final (el 1 de mayo, ya muy mermado, quiso venir a despedir a Pepe Guayo). Y siempre que podía, descansaba temporadas en su molino familiar de Arnedo (La Rioja), por donde pasamos fines de semana todos sus amigos.
Hoy, desde luego, es un día muy triste. Jamás se borrará de nosotros su memoria, nos ha dejado huella. Yo en Alberto supe ver la persona que, con sus aciertos y también con sus errores, nunca daba la espalda a nada y siempre sabía proponer caminos. Mi recuerdo, por siempre imborrable, será verlo subido en su bicicleta, pedaleando para progresar.
Breve biografía:
El ex-Alcalde de Valencia de Don Juan, ganador
de las elecciones municipales de 1979, 1983, 1987 y 1991 en dicho
municipio, y también ex-Presidente de la Diputación Provincial de León
entre 1984 y 1991, Alberto Pérez Ruiz, tras encontrarse varios días en
grave estado de salud, incluso ingresado en la UCI del Hospital de León,
ha fallecido hoy día 28 de mayo de 2014, a los 79 años de edad.
Pérez Ruiz, riojano de nacimiento (Arnedo, 1935), fue párroco de
Aldeanueva de Ebro. Pero decidió dejar su vida eclesiástica para casarse
y estudiar Ciencias Exactas en la Universidad Complutense de Madrid. Ya
como profesor de matemáticas, llegó a León para impartir clases en el
Santa María del Páramo el año 1973, localidad donde en 1977 fundó una
agrupación del PSOE junto a otras seis personas.
Posteriormente se trasladó al instituto de bachillerato Valencia de
Don Juan, donde desarrollaría el resto de su carrera profesional como
catedrático de matemáticas. Y allí encabezaría la lista del PSOE en las
primeras elecciones municipales tras la recuperación de la Democracia,
saliendo elegido Alcalde en una corporación formada por 6 ediles
socialistas, 4 concejales de UCD y 1 de Coalición Democrática.
Bajo sus mandatos en Valencia de Don Juan se construyeron la Casa
de Cultura, el Grupo Esla (70 viviendas sociales), el Frontón Cubierto,
la Vía Verde o el Pabellón Deportivo Vicente López, entre otras muchas
actuaciones directas o indirectas como la residencia de ancianos, el
ensanche del puente sobre el río Esla o diversas intervenciones de urgencia
en el castillo.
Seguramente, la aportación más decisiva para Valencia de Don Juan de
las corporaciones dirigidas por Alberto Pérez Ruiz fue la creación del
polígono industrial "El Tesoro" o la implantación en Coyanza de empresas
como la maderera Garnica. El posterior desarrollo industrial, basado en
aquellos cimientos, ha significado un notable cambio para dicha ciudad.
En la Diputación de León también se recuerda la gran actividad en sus 7 años de presidencia.
Internamente, su vida política estuvo marcada, inicialmente por la
renovación del socialismo comarcal y en una última etapa por abanderar a
un sector crítico con los dirigentes provinciales, especialmente con la
ejecutiva dirigida por José Luis Rodríguez Zapatero.
Tras su jubilación profesional siguió vinculado al ámbito
político y cultural dadas sus inquietudes. Presidió la Asociación para
el Estudio de la Represión en León (AERLE), reivindicando la memoria
histórica de los desaparecidos durante y tras la Guerra Civil. Publicó
dos libros:
- En 2002 "El Sur de León. La comarca de Valencia de Don Juan y
Valderas", una completa guía del territorio leonés que tanto quería,
aunque siempre que podía se escapaba a su añorado molino en Arnedo (La
Rioja), su casa familiar.
- En 2011 "Recuerdos y reflexiones de un caminante", unas
memorias personales magistralmente hilvanadas realizando a pie el Camino
de Santiago.
Genio y figura, su ausencia deja un hueco
insustituible entre todos sus amigos, compañeros y conocidos. Tenía
mujer, dos hijas y dos nietos (Sofía y Mateo) que, pese al gran dolor que sufren por su
pérdida, saben que Alberto fue un hombre íntegro, inteligente y querido,
al cual siempre se recordará por su gran labor y cercanía. Descanse en
paz.