
Vaya desde aquí nuestra mayor ENHORABUENA para este coyantino que se ha hecho famoso en la televisión, y que disfrute del dinero... ¡qué sana envidia!
Aquí debajo podéis ver el final del programa (tras 20 seg. de publi):
La casona de los Gorostiaga ha sido derribada y no se ha salvado siquiera su cuidada fachada, en cuyo remate abalconado indicaba la fecha de su última reforma, el año 1908. Por ella tenía una estética ecléctica, propia del inicio del siglo XX, con escasos pero interesantes elementos decorativos. Sobresalían, a mi juicio, los balcones de hierro fundido que esperemos hayan sido preservados y se reutilicen en la nueva vivienda.
Pero la pérdida que hemos tenido hoy no es simplemente una casa con 103 años de historia. Bajo la fachada de 1908 se escondía una casona mucho más antigua, de ladrillo y piedra arenisca, seguramente con una notable entrada de arco. Posiblemente un edificio del siglo XVII.
Respeto la decisión de sus propietarios, pero no la comparto y por ello, educada y sosegadamente, la manifiesto públicamente. Otros muchos coyantinos piensan igual que yo, como he podido comprobar esta tarde, pero seguramente no deseen decirlo o no dispongan de los medios.
¿Y el Ayuntamiento?, pues tiene la responsabilidad de no haber introducido esta edificación en su listado de bienes protegidos en el PGOU aprobado en 2007. Incluso no habiéndolo hecho entonces, considero que ahora al menos debía haber pedido o propiciado el mantenimiento de la fachada, algo ciertamente factible y que vemos se hace en tantos lugares.
Tristemente hoy sumamos otra imagen para el recuerdo.